“El relajo de tener una embarcación sin protocolos miren en lo que nos puso”, dijo el gobernador. Los enfermos pasaron de 6 a 21 por contacto con tripulación.
“Tenemos que prepararnos ahora sí a cualquier situación desafortunada”, lamentó Everth Hawkins al hablar de los nuevos 15 casos en San Andrés y Providencia.
Ordenó que el barco Susurro fuera retirado de puerto. Confirmó que allí llevan mujeres “para satisfacer los deseos sexuales de esos capitanes o marinos”.
La embarcación, que frecuentemente va de Cartagena a San Andrés para abastecerla de alimentos, zarpó luego a Catalina y después emprendió su regreso a La Heroica. Sin embargo, uno de los tripulantes enfermó y murió, por lo que se decidió volver a la isla.
Fue allí donde empezó el contagio masivo, pues el cadáver fue retirado sin los protocolos requeridos.
Los enfermos confirmados son dos médicos de sanidad portuaria, tres miembros de la Armada Nacional que inspeccionaron el buque, los cinco tripulantes y personas que recibieron la mercancía que traía el Susurro. Cuatro de ellas se encuentran en Providencia, que estaba libre de coronavirus.
Visiblemente molesto, el gobernador endurecerá “las medidas y el toque de queda, que por lo menos se hará por días a partir de las nueve de la noche hasta las cinco de la mañana, no habrá más ejercicios de una hora ni de media hora para nadie”.
“Nadie puede salir de su casa sin tapabocas”, agregó.
“Sí quiero alarmarlos”, expresó Hawkins al anunciar las nuevas normativas.
Además, ordenó “que se dejen de hacer pruebas rápidas de COVID-19 que no sirven”, debido a que las primeras que se hicieron a la tripulación dieron negativo y por eso se les permitió salir de la isla.
“Lo que hicieron con eso fue poner en riesgo la credibilidad de la autoridad”, agregó el funcionario.
